A la hora de dibujar, las líneas son elementos fundamentales de la composición. Delinean el espacio, las estructuras y definen límites. Cuando se trata de mapas y fronteras, la línea adquiere un significado particular, pues esta "simple" expresión gráfica marca una poderosa división entre regiones, marcando el inicio o el final de un territorio. Este trazo tiene un significado profundo en el límite entre México y Estados Unidos, donde constantemente desdibuja y cuestiona la frontera. En estos lugares, el multiculturalismo es algo cotidiano, con una negociación continua de límites presente en todos los aspectos de la vida. La dinámica de estas fronteras implica el diseño y la generación de una red compleja de interacciones y colaboraciones.
En lugar de estar dividida entre tijuanenses por un lado y sandieguinos por el otro, esta región en particular se destaca como una comunidad cuya esencia armoniza con un profundo legado de colaboración transfronteriza, en lugar de ser vista como ciudades separadas por una línea. Como la primera designación binacional en la historia del programa Capital Mundial del Diseño (WDC), la región Tijuana-San Diego comparte un interés común en abordar cuestiones urbanas, sociales y económicas a través del diseño. Así, a través de conferencias, cumbres políticas y talleres, la región busca mejorar la catalización de ideas a través de su designación.
La conexión de la región es visible desde su trazado urbano, que visto en un mapa muestra la continuidad de caminos y cuerpos de agua —como el río Tijuana—, hasta la arquitectura desarrollada en ambos lados de la frontera. Además, al ser el corredor fronterizo más transitado del mundo, algunas personas que se desplazan constantemente entre estas dos ciudades viven un concepto que bien podríamos llamar “tercera nación”. La proximidad geográfica y la interacción continua han dado como resultado una cultura híbrida, colaborativa y binacional, de la que destacan varias facetas.
Una serie de ejemplos ilustran el espíritu de colaboración que históricamente ha existido en la región, mostrando el concepto de tercera nación. Un ejemplo notable es el Friendship Park, una pequeña extensión de terreno compartido dividido por una sola valla. Proyectos como "La Línea Borrosa" (The Blurred Line) también enfatizan este ideal, demostrando cómo las fronteras pueden servir para conectar en lugar de dividir. Muchas de estas iniciativas, junto con otras instancias de colaboración transfronteriza, ahora están integradas en las sedes del programa o sirven como referencia en sus conferencias, de las que hablaremos a continuación.
Salk Institute: una colaboración entre Louis Kahn y Luis Barragán
Un aspecto notable de este proyecto es su historia de cooperación, particularmente entre Luis Barragán y Louis Kahn, lo que marca uno de los primeros ejemplos modernos de colaboración transfronteriza. En la década de 1960, a través de cartas y llamadas telefónicas, los dos arquitectos establecieron una comunicación que culminó con la visita de Kahn a México y la visita de Barragán al Salk Institute en La Jolla, California.
Durante la visita de Barragán, el diseño del patio aún estaba evolucionando. A pesar de que Kahn había propuesto varias ideas, ninguna había resultado convincente hasta ese momento. Fue durante esta visita que se generaron interacciones significativas entre Salk, Kahn y Barragán, particularmente al considerar el espacio central entre los laboratorios. Esta reflexión tuvo un profundo impacto en el proyecto. Aunque cada uno siempre había desarrollado un lenguaje arquitectónico propio, en el Salk Institute se pueden percibir puntos de conexión sutiles pero significativos, particularmente en la apreciación de las formas puras y el agua, un elemento compartido entre el centro de investigación y la obra de Barragán.
Exploraciones de la Región San Diego-Tijuana
Un ejemplo de la visión común de la región es el proyecto de investigación “Paraíso temporal: una mirada al paisaje especial de la región de San Diego”, un informe preparado en 1974 para la ciudad de San Diego por Donald Appleyard y Kevin Lynch. Este estudio promueve un enfoque unificado para el desarrollo y la cultura compartidos entre San Diego y Tijuana, y ha sido continuado por el Dr. Bruce Appleyard (hijo de Donald Appleyard), quien refuerza el enfoque conjunto entre las dos ciudades. Por lo tanto, no se puede hablar de San Diego sin mencionar a Tijuana, y viceversa.
Al explorar la relación transfronteriza, el proyecto analiza y presenta oportunidades potenciales para desarrollar el área preservando al mismo tiempo el paisaje natural común. Propone un enfoque a escala humana, con el objetivo de frenar y reorientar el desarrollo urbano. Este plan abarca desde carreteras y mejores sistemas de transporte hasta pasarelas peatonales y ciclovías, e incluso la construcción de un aeropuerto binacional en la frontera con México, algo que en cierta medida ya es una realidad con el aeropuerto internacional de Tijuana.
Intercambio Transfronterizo: Centro Cultural Tijuana y Parque Balboa
El establecimiento de espacios culturales en la región es vital no sólo para mejorar el paisaje urbano de Tijuana y San Diego, sino también para servir como centros de intercambio y conectividad entre México y Estados Unidos. Como parte de la agenda del WDC, el Centro Cultural Tijuana (CECUT) fue sede de varios eventos del World Design Festival impulsado por Tijuana Design Week. Este edificio, diseñado por Pedro Ramírez Vázquez, no solo simboliza una fracción de la identidad de la ciudad, sino que también sirve como centro cultural y alberga una amplia gama de actividades que incluyen salas de exposiciones, conferencias y un museo.
De manera similar, el Parque Balboa refleja este espíritu como el corazón de la recreación y la vida comunitaria en San Diego. Este espacio es el parque urbano más grande de Estados Unidos y alberga el Instituto de Arte de San Diego y el Museo de Artes Fotográficas, entre otros. También recibe una serie de eventos itinerantes que se extienden por todo el parque. Tanto en el CECUT como en el Parque Balboa, el tema de las fronteras es recurrente y enriquece la vida cultural de ambos lugares.
Para fortalecer aún más este vínculo y avanzar en la conexión entre las ciudades, el Exchange Pavilion se instalará tanto en Tijuana como en San Diego. En Tijuana estará ubicado en la Plaza Independencia (cerca del CECUT), mientras que en San Diego se posicionará en la Plaza de Panamá en el Parque Balboa. Como reflejo de la importancia del WDC para la región, la instalación temporal actuará como un puente que conectará a personas de diversos orígenes, inspirará conversaciones y fomentará un sentido de unidad.
¿Qué sigue en el programa Capital Mundial del Diseño (WDC)?
Como designación bianual, en lugar de un evento independiente, el programa WDC continuará expandiéndose a través de otros eventos como World Design Experience y World Design Network of Cities Meeting. Estas actividades culminarán con la Ceremonia de Convocatoria, un evento simbólico que marcará la "entrega" oficial del reconocimiento WDC de San Diego-Tijuana a la región de Frankfurt RheinMain (Alemania), la próxima ciudad anfitriona.
A medida que llega esta transición, el programa WDC 2024 celebra la región de San Diego-Tijuana, destacando los logros colectivos en diversas expresiones de diseño e inspirando acciones colaborativas para abordar los desafíos de la comunidad. El objetivo es dotar a ambas ciudades de nuevas herramientas para aplicar el diseño de forma reflexiva, logrando transformaciones positivas en su contexto.